Ayacucho/Perú
Nos dicen que hemos recuperado la democracia, cuando en realidad hemos recuperado la partidocracia es decir los partidos tradicionales que siempre se repartieron el poder y el gobierno para sus propios fines y se olvidaron de la población.
Una democracia puede caer rápidamente en una demagogia (populismo) en el Perú esos enemigos de la democracia han sido el terrorismo, la demagogia, y por último la corrupción. Ellos conducen de una forma u otra al autoritarismo, atentando contra la libertad, el Estado de Derecho, la constitución y el contenido real de la democracia.
La democracia no se trata de elecciones cada 5 años hay que ejercerla y construirla día a día, ya que la democracia es un régimen político en que el pueblo ejerce la soberanía. La democracia en el método mas efectivo de educar a la ciudanía en ellos y permitir cambios pacíficos. La democracia no es un instrumento para lograr el control del poder sino tiene que aprender a resolver los problemas de la gente (empleo, educación, salud, etc.) preservando su espíritu sin demagogia.
Por lo tanto, la democracia es un medio y no un fin, mediante una educación política recordar a la gente, al simple ciudadano, que los derechos y los ideales de la democracia solo se sostiene en una doctrina liberal.
La democracia no es un fin en sí mismo; es una forma de gobierno donde rige la voluntad de la mayoría, que permite el mayor ejercicio de la libertad (libertad, que para algunos socialistas era un “prejuicio burgués”, ha sido un logro del liberalismo y una pieza fundamental de la democracia).
El liberalismo y la democracia debe ser una doctrina política no al servicio de los intereses de un grupo particular, sino al servicio de los intereses del pueblo.